SELECCIÓN FEMENINA
Río de Felicidad de un Equipo maravilloso (70-50)
6/17/2016 - 2:17 PM
El baloncesto español estará representado en los Juegos Olímpicos de Río por sus dos Selecciones. La femenina consiguió el billete tras vencer a Corea en el partido decisivo. Un maravilloso éxito, fraguado en años de trabajo, que abraza a todo el baloncesto español.
MIGUEL PANADÉS
Río de ilusión, de satisfacción, de felicidad, culminación de un éxito trabajado desde hace muchos años, en el que están implicadas muchas jugadoras, técnicos, directivos, federaciones… Faltaba una victoria y esta llegó desde la brillantez, desde el esfuerzo, desde la armonía que ha acompañado el rendimiento de una selección que lleva años enamorando al aficionado. Este 17 de junio de 2016 se convierte en otro día para la historia de nuestro baloncesto. El baloncesto español estará en Río con sus dos selecciones. Pocos países pueden presumir de ese privilegio.
Desde el salto inicial se plasmó sobre el parquet la dificultad de un partido duro para España, tanto por la trascendencia de tener que afrontarlo como favorita, como por la oposición de un rival muy duro en defensa y con un porcentaje, durante el primer cuarto, muy alto en las finalizaciones. España frenaba a sus tiradoras de tres puntos, perseguía bien en los bloqueos indirectos pero le costaba llegar a esos tiros a cinco metros de las jugadoras interiores rivales. Del empate a 8 de los primeros cinco minutos se pasó a un ilusionante 19-11 del final de primer cuarto con Sancho Lyttle como claro referente ofensivo y Laura Gil, que tuvo que entrar en pista muy pronto por las dos faltas de Nicholls, adaptándose muy bien en defensa a esas amenazas de cara de las pivots coreanas.
Pero estaba claro que nada sería fácil esa mañana de junio y Corea intensificaba, endurecía, su defensa individual desquiciando por momentos a Alba Torrens y Sancho Lyttle y el marcador se igualaba a 23 mediado el segundo cuarto. Con Silvia Domínguez marcando un ritmo adecuado y Anna Cruz encontrando caminos hacia el aro en medio de la poblada defensa rival España volvió a distanciarse en el marcador culminando la primera parte con un parcial de 13-2 con triple final, el primero, sobre la bocina de Alba Torrens y que permitió irse al descaso con la máxima diferencia (36-25).
Desde el esfuerzo, desde la intensidad permanente, desde el trabajo que ha caracterizado a esta selección que une siempre talento y humildad, España afrontó el tercer cuarto sabiendo adaptarse a un partido cada vez más duro en defensa y en el que cada ataque debía trabajarse al límite. Pese a la tercera falta de la mejor jugadora ofensiva de nuestra selección, Little, la producción no bajó gracias a la irrupción de nuevo en pista de una Silvia Domíguez pletórica con seis puntos seguidos al final del tercer cuarto (dos “dos más uno”) que distanciaron a 14 al final del tercer cuarto (51-37).
A diez minutos de hacer realidad el sueño nuestra selección se sacudió de toda la tensión acumulada durante meses, de toda esa necesidad de completar un ciclo maravilloso que culmina en Río. El desenlace se vivió desde la alegría, desde la satisfacción por haber conseguido un éxito merecidísimo, un éxito que abraza todo el baloncesto femenino español y del cual todos y cada uno de sus integrantes puede sentirse partícipe. El marcador se ampliaba entre “Ríos de Alegría”, con Alba Torrens sumando, Laura Gil rindiendo a un nivel altísimo y con los aficionados y familiares de nuestras jugadoras celebrando el triunfo desde la grada. Todas las jugadoras y el equipo técnico acabaron disfrutando sobre la pista, abrazados como lo que son: Un Equipo Maravilloso.