IBON LANDA / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB



Laia Palau reconoce que resulta difícil resistirse a la fuerza de atracción de la Selección. Por sus éxitos deportivos, pero también porque el grupo de jugadoras que componen este equipo ha convertido cada concentración o torneo en una experiencia especial. Una que, según la capitana, deberían vivir “todas las jugadoras de España”.

“No somos una Selección, somos un equipo”. Así define Mondelo a sus jugadoras, todas de clase mundial, que según Laia anteponen el bien común al individual, “con un comportamiento y dinámica de grupo excelente que es un ejemplo para cualquiera. Por eso, la clave es estar por el equipo, saber qué tienes que hacer y hacerlo con generosidad”.

La próxima parada de Laia y sus compañeras es la Copa del Mundo de Tenerife, en casa, ante su afición. “Un reto, la razón por la que estoy aquí”, asegura Laia, cuyo largo compromiso con la Federación y su sentimiento de responsabilidad con la Selección han resultado pilares fundamentales para apoyar su decisión de regresar: “Intento ayudar dentro de la pista, pero fuera también hago un trabajo importante que sirve para que otras jugadoras no tengan tanta presión”.

“Nosotras no somos Estados Unidos, no vamos por encima de nadie. Internamente sabemos que este Mundial va a ser muy difícil”, asegura Laia. Para plantarse en los partidos decisivos con opciones, la mujer con más internacionalidades de la historia da la receta: “Para llegar hay que estar a nuestro nivel. El objetivo es llegar a ese momento de la mejor manera física y mentalmente posibles”.

Una Copa del Mundo que Laia ve “como una cosa de todos. Espero que si mantenemos este estilo de juego y de pasarlo bien, todo el mundo quiera participar”. Una fórmula que ha llevado a la Selección a encadenar éxitos y a presentarse en Tenerife como campeona de Europa, y subcampeona Olímpica y del Mundo.

Por esa razón, a la capitana le cuesta quedarse con una medalla, aunque siente predilección por la Plata de Río. Sin embargo, más que quedarse con un éxito concreto, Palau destaca “la sucesión de logros de este grupo”. El legado de Nieves Anula, Amaya Valdemoro y Elisa Aguilar, las jugadoras que moldearon su carácter, reside en Laia y ella misma se encargará de conseguir que la próxima generación de jugadoras aprenda que en esta Selección, se puede competir y ganar disfrutando.