PREEUROPEO FEMENINO 2017
España regala excelencia ante Suecia (52-75)
11/21/2015 - 6:46 PM
En una actuación maravillosa, la Selección Española ganó el primer partido del PreEuropeo convirtiendo el partido en un perfecto regalo baloncestístico, en una demostración de excelencia por juego y por generosidad en el esfuerzo. El miércoles, segundo partido ante Finlandia.
MIGUEL PANADÉS / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
Sinfonía perfecta a cargo de una selección española que ante Suecia y en el primer partido de PreEuropeo interpretó maravillosamente todas las notas, individuales y corales, que el baloncesto necesita para acercarse al arte. Se reencontraron y les bastaros unas pocas sesiones de entrenamiento y unas cuantas charlas recordando conceptos para que en el primer partido saltaran a la pista y desde el salto inicial hicieran sonar la música de su juego con la misma armonía y brillantez, con la misma fabulosa sencillez que lo hicieron hace unos meses cuando consiguieron mantenerse el lo alto del concierto internacional.
El marcador del pequeño y abarrotado pabellón de Sodertalje no hizo más que acompañar con sus números la superioridad que España mostraba en la pista y el 6-16 del minuto cinco tan sólo evidenciaba la fluidez ofensiva desde la dirección de Laia Palau, desde la velocidad para sacar ventajas de Marta Xargay y Anna Cruz y la eficacia a pocos metros del aro de las interiores Nicholls y Liittle. El 13-22 del final de primer cuarto avisaba de los triples de Zahui (tres de tres en los primeros diez minutos) y también de la inteligencia táctica para leer perfectamente las defensas de los bloqueos directos y buscar siempre ese pase adecuado en tiempo y lugar para buscar el tiro liberado.
Sobre el escenario de los sueños iban apareciendo intérpretes como Silvia Domínguez o Laura Gil quienes se sumaban a la armonía general sabiendo adaptarse al juego con la misma facilidad que las que estaban en pista. 15-28 e intervención sutil y eficaz de Víctor Lapeña situando a España en una defensa zonal que se ajustaba adecuadamente al ataque de un rival con más calidad que la que podían demostrar y que de vez en cuando daba muestras de peligro con acciones individuales de mérito. Cristina Ouviña, que regresaba a la selección, se sumaba a la sinfonía y su facilidad ofensiva distanciaba aún más a las nuestras que, con una canasta final de una siempre eficaz desde la sobriedad Sancho Little se marchaba al descanso con un elocuente 24-41 en el marcador.
Los triples de Marta Xargay y Anna cruz ampliaban diferencias (32-51) y España le añadía a su brillantez una progresiva intensidad defensiva que reflejaba la ambición deportiva de unas jugadoras que no sólo quieren ganar sino que quieren hacerlo desde la excelencia, desde la capacidad para buscar. Fue un perfecto regalo que agradeció toda la afición y seguro y especialmente el Director Deportivo del la FEB Ángel Palmi que horas antes había sido sorprendido por las propias jugadoras y técnicos con una tarta de cumpleaños. Y entre la armonía y la excelencia el partido transcurría con el marcador definido, incontestable, con el partido resuelto al final del tercer cuarto, 38-62, con Sancho Little convertida en líder anotadora de nuestra selección y del partido.
Una nueva demostración de calidad y de implicación. Una nueva demostración que estas jugadoras representan a la perfección ese papel de referentes del baloncesto femenino español, de ejemplos de nuevas generaciones. Esta selección es la ambición deportiva convertida en jugadoras de baloncesto porque desde la pista buscan constantemente algo tan difícil de conseguir como es la excelencia. Disfrutan con lo que hacen, disfrutan juntas llevando el baloncesto a una maravillosa dimensión y, no nos cansaremos de insistir, lo hacen desde la armonía. El marcador, por cierto, siguió acompañando al partido no como fin sino como consecuencia del juego. En el último cuarto las diferencias se mantuvieron, tanto como el esfuerzo de nuestras jugadoras por seguir produciendo baloncesto y de las suecas por evitar diferencias mayores.